Revisiones
Revisión: Mountain Dulcimer de Embertone
Escrito por: Santiago Bruno
En esta ocasión vamos a probar el Mountain Dulcimer de la empresa Embertone. Como introducción puedo decir que cada vez que necesité una textura autóctona de gran calidad en alguna composición, la empresa Embertone cumplió con todas mis expectativas y se instaló entre mis sonidos preferidos a la hora de necesitar este tipo de sonidos.
Mountain Dulcimer es una librería que recrea un Dulcimer de montaña, un bello instrumento de cuerda de la familia de las cítaras, típicamente con tres o cuatro cuerdas, originario de Appalachia, Estados Unidos. Su sonido es tan particular que al solo oír unas cuantas notas nos hace viajar directamente a esos increíbles paisajes de montaña. A manera de referencia rápida y clara, al tocar las primeras notas, no pude evitar recordar la música Gustavo Santaolalla en Babel, aquellas escenas sumergidas en medio de las montañas de Marruecos.Lo divertido de Mountain Dulcimer es que antes de entender todas las posibilidades que tiene, uno puede estar un buen rato entretenido, disfrutando de simplemente tocar una escala con la nota pedal sosteniendo todo.Entrando ya directamente en el funcionamiento técnico, el primer modo por default es el Natural, en el que encontramos el teclado dividido en teclas rojas en la mano izquierda y azules en la derecha. Con las rojas vamos a poder cambiar la nota pedal que queremos escuchar. Lo interesante de esto es que no necesariamente vamos a ir cambiando la nota pedal a medida que cambiamos de acorde, sino que podemos conservarla buscando sonoridades particulares. Si por el contrario, lo que queremos es un sonido simple y que acompañe la armonía de manera sencilla podremos ir cambiando la nota pedal en cada acorde, todo esto tocando en tiempo real sin ningún tipo de dificultad.El segundo modo es el Smart y en él vamos a poder combinar la posibilidad de tocar melodías con notas sueltas por un lado y acordes de manera autónoma por otro, sin la presión de la nota pedal del otro modo. Para darle carácter rítmico a los acordes, nos ofrece una octava del teclado en el lado izquierdo para la ejecución de figuras rítmicas y la parte derecha queda libre para alternar entre melodía y acorde según sea requerido, tal como si fuera un piano.En el modo Split, en el que se clonan dos octavas para poder superponerse de manera independiente, creando sonoridades más que interesantes.La última opción y tal vez mas motivadora, es el Strummer; un arpegiador con muchísimos presets, tanto para acordes como para notas separadas. Para poder usarlo, nos dirigimos a la pestaña Strummer y activamos el botón de encendido. Algo para destacar es que cada preset se puede modificar de la forma que querramos, con gran variedad de opciones y luego, tenemos la posibilidad de guardarlo. Las opciones para crear un nuevo patrón son prácticamente infinitas y no solo eso, sino que también en cada uno se puede modificar el pitch, velocity, dinámica, etc. Cada patrón puede ser de un compás o de cuatro en un loop, combinándolos a nuestro antojo.
En resumen, Mountain Dulcimer es una gran opción a la hora de dejar fluir la creatividad, con muestras de excelente calidad y una gran versatilidad para utilizarlo en muchos estilos, tanto como para dar un toque estético, como para sostener una canción completa. Con una gran facilidad de uso y un sonido terminado, sin dudas queda entre mis sonidos autóctonos favoritos.
Agradecemos al equipo de Embertone por la licencia otorgada para realizar esta review.